Desde el año 2005, que ingresé como personal contratado en el IPC, he dado lo mejor de mi para estar a la altura de la misión, visión, objetivos y políticas institucionales, por ello me he dedicado a una alta preparación y exigencia a los participantes, cuestión que no es fácil en estos últimos tiempos, porque la praxis de las cátedras que imparto no escapan a la realidad. Recuerdo un día mi desesperación para hacerme entender con el alumnado, usando tantas explicaciones en matemática financiera, ya que los jóvenes venían con mala base tanto del bachillerato como de los cursos precedentes. Luego de múltiples intentos y argumentaciones lograron entender, y fue tanta la emoción que sentí que me arrodillé en el centro del salón y grite en voz alta: “gracias a Dios por ser instrumento tuyo padre creador aquí en el IPC, para darme a entender, gracias, gracias, gracias”. Esto marcó tanto a los estudiantes, que ya graduados, siempre lo recuerdan y me expresan: – ¿Profe, desde cuando no se arrodilla para dar gracias a Dios porque sus alumnos entendieron, o ahora no aplica esa? Y mi respuesta es, que en todo momento lo hago cuando no me entienden al principio y luego, después de dar gracias, siempre entienden.
Alfredo Sáez. Egresado del Doctorado de Educación Ambiental en 2023. Profesor de Planta del IPC.